María Laura Andrade
La decoradora de eventos nos cuenta de qué manera trajo desde su país natal, Ecuador, el ímpetu y el estilo de celebrar por lo alto las bodas y otros eventos, en lo sencillo se aprecia la elegancia, eso sí siempre dentro del marco de los tiempos de pandemia.
María Laura Andrade es ecuatoriana, país donde las celebraciones son muy elegantes y con mucha producción, incluso los cumpleaños infantiles. “Yo comencé haciendo todo este tipo de festejos a mis niños y en mi casa. Hasta que de pronto lo pensé bien, eran muy comentados y novedosos así que empecé a hacerlos para otros. Ha sido interesante proponer a las personas mis ideas”, recalcó la empresaria que partió con este rubro en 2018, ofreciendo los siguientes servicios: invitaciones, música, flores y eventos personalizados.
Para dar vida a cada celebración, buscan un centro de eventos y lo arriendan, “todo depende de lo que nos pidan, así yo propongo y vemos la necesidad de ellos y lo que yo pueda hacer”. Esta búsqueda también incluye lugares abiertos “nos aprovechamos de los espacios, hay personas que les encanta estar al aire libre, arreglar un espacio abierto es más desafiante que los cerrados, la gente lo aprovecha más. En fiestas de 15 los adolescentes gozan los jardines y en los matrimonios civiles dan calidez”
Producto de la pandemia el enfoque es diferente pero no ceden las ganas de festejar cuando la ocasión lo amerita “siento que todos cambiamos con esta crisis.
Bajo esta premisa, primero acogemos y apoyamos a los novios, explicándoles que hay peores cosas, que sacaremos adelante el evento y que entre todos iremos ayudándonos. Hemos implementado más privacidad y más discreción en lo que se celebra. A todos nos ha pasado algo directa e indirectamente con la pandemia y si bien los novios lo único que quieren es vivir su boda, también se han debido acoplar a la realidad y se siente empatía”. María Laura acotó “A veces replantear el número de invitados no es fácil, pero todo se logra con acuerdos. Si bien se puede pensar que se van a ahorrar gastos, hay mucha gente que se complica mucho, pero en general creo que todos entienden la realidad mundial, por eso nosotros nos ocupamos para no preocuparlos”.
En materia de tendencias María Laura mencionó “en lo sencillo se aprecia la elegancia, la cual se puede reflejar a través de flores, colores, eventos al aire libre, fibras naturales. Implementar un sistema de tener todo para los invitados de manera personal (alcohol, mascarillas), muchos dulces artesanales, bolsas para dulces y en los tragos todo uno a uno”.
“Los novios o los que quieren hacer una celebración buscan algo fresco, nuevo y lejos de lo tradicional y aquí vamos a estar para proponer y ayudarlos”, dijo finalmente María Laura Andrade.
María Laura Andrade
La decoradora de eventos nos cuenta de qué manera trajo desde su país natal, Ecuador, el ímpetu y el estilo de celebrar por lo alto las bodas y otros eventos, en lo sencillo se aprecia la elegancia, eso sí siempre dentro del marco de los tiempos de pandemia.
María Laura Andrade es ecuatoriana, país donde las celebraciones son muy elegantes y con mucha producción, incluso los cumpleaños infantiles. “Yo comencé haciendo todo este tipo de festejos a mis niños y en mi casa. Hasta que de pronto lo pensé bien, eran muy comentados y novedosos así que empecé a hacerlos para otros. Ha sido interesante proponer a las personas mis ideas”, recalcó la empresaria que partió con este rubro en 2018, ofreciendo los siguientes servicios: invitaciones, música, flores y eventos personalizados.
Para dar vida a cada celebración, buscan un centro de eventos y lo arriendan, “todo depende de lo que nos pidan, así yo propongo y vemos la necesidad de ellos y lo que yo pueda hacer”. Esta búsqueda también incluye lugares abiertos “nos aprovechamos de los espacios, hay personas que les encanta estar al aire libre, arreglar un espacio abierto es más desafiante que los cerrados, la gente lo aprovecha más. En fiestas de 15 los adolescentes gozan los jardines y en los matrimonios civiles dan calidez”
Producto de la pandemia el enfoque es diferente pero no ceden las ganas de festejar cuando la ocasión lo amerita “siento que todos cambiamos con esta crisis.
Bajo esta premisa, primero acogemos y apoyamos a los novios, explicándoles que hay peores cosas, que sacaremos adelante el evento y que entre todos iremos ayudándonos. Hemos implementado más privacidad y más discreción en lo que se celebra. A todos nos ha pasado algo directa e indirectamente con la pandemia y si bien los novios lo único que quieren es vivir su boda, también se han debido acoplar a la realidad y se siente empatía”. María Laura acotó “A veces replantear el número de invitados no es fácil, pero todo se logra con acuerdos. Si bien se puede pensar que se van a ahorrar gastos, hay mucha gente que se complica mucho, pero en general creo que todos entienden la realidad mundial, por eso nosotros nos ocupamos para no preocuparlos”.
En materia de tendencias María Laura mencionó “en lo sencillo se aprecia la elegancia, la cual se puede reflejar a través de flores, colores, eventos al aire libre, fibras naturales. Implementar un sistema de tener todo para los invitados de manera personal (alcohol, mascarillas), muchos dulces artesanales, bolsas para dulces y en los tragos todo uno a uno”.
“Los novios o los que quieren hacer una celebración buscan algo fresco, nuevo y lejos de lo tradicional y aquí vamos a estar para proponer y ayudarlos”, dijo finalmente María Laura Andrade.